Cuidar tu piel aparte de tu rutina facial
Un buen cuidado de la piel, como la protección solar y la limpieza diaria, puede mantener la piel sana y radiante.
1. Dieta e Hidratación
Entre más verde comas mejor. Puedes hacer esto incluyendo frutas y especialmente verduras en todas tus comidas. O preparando un jugo verde en la mañana. Una dieta saludable puede ayudarte a verte y sentirte mejor. Come muchas frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras. Algunas investigaciones sugieren que una dieta con alto contenido de aceite de pescado o suplementos de aceite de pescado y baja en grasas no saludables y carbohidratos procesados podría promover una piel más joven. Beber mucha agua ayuda a mantener la piel hidratada, para que tus productos puedan ayudar a que tu piel mantenga esta hidratación.
2. Duerme
Cuando duermes es cuando el proceso interno de renovación de tu piel alcanza su punto máximo: aumenta el colágeno y la elastina, se repara el daño celular, se recupera el pH y se eliminan las toxinas acumuladas por la contaminación, los radicales libres y el sol. Al dormir 8 horas la piel estará más fresca, más brillante y más elástica. El sueño no es solo reparador sino también tonificante.
3. Protégete del sol
Aparte de usar protector solar puedes buscar lugares con sombra y usar prendas de vestir que te protejan del sol, como sombreros y gorras. Evitando el sol entre las 11 de la mañana y las 4 de la tarde, que son las 5 horas donde los rayos UV son más fuertes.
4. Baños cortos
El agua caliente y tardar mucho en bañarte eliminan los aceites naturales de la piel, trata de bañarte en menos 5 minutos o menos y usar agua tibia en vez de agua caliente. Seca tu piel con golpecitos. Después de bañarte, sécate la piel suavemente con una toalla dando pequeños toques para que quede algo de humedad en la piel.
5. Relájate
Cuando el estrés está fuera de control, la piel puede volverse más sensible y se pueden desencadenar brotes de acné y otros problemas cutáneos. Para fomentar una piel sana, y un estado de ánimo sano, toma medidas para controlar el estrés. Establece tus límites, recorta tu lista de tareas pendientes y encuentra tiempo para hacer las cosas que disfrutas. Los resultados podrían ser más significativos de lo que esperas.
Continúa leyendo: Los 5 básicos del cuidado de piel
Más información: Mayo Clinic